I’ve successfully privatized world peace. What more do you want?

Apologista: persona que se dedica a explicar por qué los demás deben de perdonar las fallas de una persona, cosa, o secuela de película exitosa.

El único pecado de Tony Stark era su ignorancia. Ignoraba el dolor que sus armas causaban a las personas de otros países. Ignoraba la traición a la que lo sujetó el hombre que había fungido virtualmente como su tutor, debido a su ausente padre; a la madre no se le menciona (incluso he llegado a pensar que se llama Martha y no se lo quiere decir a nadie), cosa rara siendo que en los cómics su fundación se llama ‘Maria Stark’.

Lo que más desconocía Tony, acorde a Jon Favreau, quien repite en la dirección y como Happy, era a su pasado. Su pasado como hijo de Howard Stark, un hombre que en esta película es interpretado, interesantemente, por una persona totalmente distinta del siguiente actor que lo encarnaría, y que es más reminiscente de Walt Disney que de Henry Ford: su vestir, su aspecto, sus películas sobre sí mismo, la necesidad de crear un espacio tanto abierto como cerrado para poder exponer sus ideas a todo el mundo: La Expo Stark, muy parecida a la Feria Mundial donde su padre presentó el primer auto volador (rojo, como les gusta en S.HI.E.L.D.). Pero me estoy adelantando a mí mismo.

Ivan Vanko aparece como el hijo de Anton Vanko, un ex colaborador de Howard que firma los planos de los diseños del arco reactor que le da poder a la armadura de Iron Man y ambos buscan venganza. Como siempre, mi enfoque va directo a los comics: Anton Vanko en realidad era el Crimson Dynamo (nota curiosa: Paul McCartney, sí, ESE Paul McCartney, tiene una canción donde lo menciona) y no Whiplash, un villano muy antiguo que usaba un látigo eléctrico. Mickey Rourke es bueno para hacer hombres rudos como Vanko, ya lo vimos en Sin City interpretando a Marv, pero aquí, de alguna manera, da todavía más repulsión como Vanko. Es,digamos, un villano que fusiona dos. Y no lo logra muy bien. No es muy comercializable su imagen, no está muy claro su propósito, y los temas de los pecados de los padres se manejan con la delicadeza de un oso en cristalería. Su frase favorita, gane o pierda contra Stark, es «You lose«. Aunque todos recordamos mejor las lamentaciones por su mascota.

Pepper se ve amenazada como la nena más bonita del kinder por la presencia de Natasha Romanova. Si en la anterior entrega de la saga vimos al fundador de los Avengers (aún siento raro escribir eso, no importa el tiempo que pase) en la escena post-créditos, ahora vemos a Scarlett Johansson…

Y la vemos… Y la vemos… ahem, la vemos como Black Widow antes de que inicie la primera película de Avengers. Nick Fury también aparece para regañar a Stark. Y ni siquiera hemos llegado al villano principal, representado carismáticamente por Sam Rockwell. La cantidad enorme de personajes y líneas argumentales que se entretejen alejan a la mayoría de los espectadores, pero a mí me parece un valiente esfuerzo por dotar a la familia Stark de coherencia, legado y una razón para seguir adelante para Tony.

Su amigo James Rhodes es quien le roba el Mark II, el Iron Man color hierro. Lo ayuda el ejército de los Estados Unidos a personalizar esa armadura (con arco reactor fuera del pecho del ocupante, afortunadamente) y lo convierte en la Máquina de Guerra. Es bastante afortunado que AC/DC ya tuviera una canción que se llamara War Machine, de lo contrario, probablemente no hubiésemos tenido a esta bandototota en el soundtrack. Otra razón para que yo vea esta película seguido. War Machine acaba siendo controlado por Vanko, para después pelear ambos Hombres de Hierro contra él, en un final predecible y clásico.

Si Marvel Studios decidió no hacer una referencia muy descarada a la historia «Demon in a Bottle» debido a un respeto por RDJ, o porque ya se volvería una película demasiado oscura para los públicos más jóvenes, o porque fue suficiente con hacer orinar a Tony dentro de la armadura, es algo que se quedará perdido en los anales de la historia. Baste saber que aun siendo un comercial para The Avengers (2012), esta película se sostiene (aunque endeblemente) y tiene varios buenos momentos.

#Starkiller

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