Continuamos con la extensa colección de Falange y seguimos repasando al librería del Wii, donde vimos como era posible engañar al publico aumentando las expectativas donde la tecnología no estaba ahí o como las cosas mas sencillas no necesitaban nada mas para vender, pasaremos de montones de plástico a todas las maneras de hacer que un mini avatar juegue, del salvaje oeste (espada en mano), a las maracas.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí